El candidato alrededor del 47% de los votos pero no alcanzó la mayoría para evitar el ballotage. por Mauricio RABUFFETTI / Con Ana Inés CIBILS en Rio de Janeiro y Eugenia LOGIURATTO en Brasilia El ultraderechista Jair Bolsonaro ganó por amplio margen la primera vuelta de las elecciones presidenciales de Brasil, pero deberá medirse con el izquierdista Fernando Haddad el 28 de octubre. Con
casi el 86% de las urnas escrutadas, Bolsonaro, un excapitán del
Ejército, de 63 años, tenía 47,60% de los votos, frente al 27,24% de
Haddad, designado candidato del Partido de los Trabajadores (PT) por el
encarcelado expresidente Luiz Inácio Lula da Silva. Los resultados a boca de urna del instituto Ibope dan 45% a Bolsonaro y 28% a Haddad. - Alivio en el PT - En
un hotel en el centro de Sao Paulo, donde Haddad dará su conferencia de
prensa, se escucharon gritos de júbilo y alivio al divulgarse los
sondeos. En la explanada de los ministerios de Brasilia, los partidarios de Bolsonaro reaccionaron con desilusión. Tras
emitir su voto por la mañana en Sao Paulo, Haddad se dijo convencido de
que habría segunda vuelta y empezó a tender puentes con otros
candidatos. La clave para que Haddad se acerque a los porcentajes
de Bolsonaro reside en el centroizquierdista Ciro Gomes, que tenía
12,45% de los sufragios. Bolsonaro y Haddad son los vencedores y al mismo tiempo los candidatos con mayor índice de rechazo. Haddad,
un exalcalde de Sao Paulo poco conocido en otras regiones, heredó una
buena parte del electorado de Lula, sobre todo entre la población pobre
que mejoró sus condiciones de vida bajo su gobierno (2003-2011). Pero
también heredó el odio que Lula inspira entre quienes le reprochan los
escándalos de corrupción revelados por la Operación Lava Jato y la
crisis económica en la que se sumió el país bajo el mandato de su
heredera política Dilma Rousseff, destituida por el Congreso en 2016. Durante
la campaña, Haddad "se olvidó mucho del centro, que es fundamental. Sin
el centro no se gana una elección y menos aún se gobierna, entonces
precisa esos apoyos ya. Son tres semanas, una campaña cortísima, y más
aún tiene que pensar en la gobernabilidad, estbleciendo compromisos con
esos sectores", dijo André César, de la consultora Hold en Brasilia. Bolsonaro,
por su parte, recibió en la última semana apoyos de poderosos sectores,
como los ruralistas y las iglesias evangélicas. Pero debe lidiar
con un historial de declaraciones racistas, misóginas y homófobas y con
sus justificaciones de la tortura durante la dictadura militar
(1964-1985), que le valieron un amplio rechazo de mujeres y de las
minorías. En su último video en Facebook, prometió gobernar "inclusive" para los ateos y para los gays. "Gobernaremos
para todos, independientemente de su fe religiosa, inclusive para quien
es ateo. Gobernaremos para todo el mundo, para los gays incluso, que
hay gays que son padres, que son madres", afirmó. Fuente https://www.subrayado.com.uy/habra-segunda-vuelta-brasil-el-ultraderechista-bolsonaro-como-favorito-n515895 |