El 60% del agua de pozo que se usa en tambos está contaminada, padece los mismos problemas que la superficial y ya hay problemas de potabilidad.Ojos que no ven, corazón que no siente”, es el refrán que mejor le calza
a los recursos hídricos subterráneos de Uruguay. El agua subterránea,
entendida como una de las riquezas del país, representa el 28% del agua
suministrada por OSE y es utilizada mayormente para consumo y riego.
Pero ha sido históricamente desatendida. Tanto que no hay una norma que
obligue a su monitoreo o que prohiba, por ejemplo, que los pozos negros o
los depósitos de materia fecal de los tambos o corrales estén cerca de
la fuente de agua. |